SENDERO DEL VINALOPÓ

TIEMPO

1h. 32 min.

TIPO DE RUTA

Senderismo

DIFICULTAD

Baja

DISTANCIA

5700 metros

Este recorrido, que no dispone de homologación, permite cruzar el Paraje de los Algezares siguiendo el curso del río Vinalopó. Iniciando la marcha por el camino Puente de Hierro, de norte a sur, se observa en la otra orilla del Vinalopó las ruinas del Castillo del Río (s. XIII). A continuación, se encuentra el barranco de la Coca, donde el elemento más singular es el puente de los Dos Ojos, un acueducto del s. XVIII. Sigue el sendero junto a conglomerados, materiales típicos en un espacio fluvial como este, hasta alcanzar las ruinas de uno de los antiguos molinos harineros, el molino del Coquero.

El itinerario continúa hasta llegar a la zona de aparcamiento. Aquí se encuentran las dependencias del antiguo molino de Caraseta, transformado posteriormente en una modesta central hidroeléctrica conocida con el nombre de Fábrica de la Luz (1895). Un corto ascenso alcanza un tramo donde el río discurre encajado entre la sierra Carbonera y El Volao, presentando considerable pendiente este último. A esta altura se observan, en el cauce, infraestructuras que forman parte de un desvío de agua de riego dirigido a Elche. El Puente de Hierro, desaparecido tras una riada, es el elemento más emblemático de este conjunto.

El recorrido pasa a un espacio más abierto, discurriendo muy próximo al río, donde se observan, consecutivamente, al oeste diferentes elevaciones y vaguadas; y, al este, la sierra del Tabayá, una elevación que ocupa el extremo oriental del espacio protegido. Una rampa de hormigón permite acceder a una elevación donde se han instalado dos miradores, en los que se puede hacer un alto en el camino para descasar y disfrutar de las impresionantes vistas. El camino Puente de Hierro termina confluyendo con el camino Peremina, muy próximo a la desembocadura del barranco de los Cinco Ojos en el río Vinalopó.

Una senda que parte del fondo del barranco hacia el sur permite alcanzar un paso sobre el río Vinalopó, en la Cola del Pantano. Así, el excursionista tiene la oportunidad de visitar la otra margen del río, una zona conocida como Rincón de Morera. Este recorrido circular discurre en buena parte por arcillas, margas y yesos, presentando un paisaje abrupto. Además, circunda elementos tradicionales, con antiguas casas de labor como la de Pablo, o extracciones de arcillas y yesos destinados a la construcción, como la cantera de Román.